Diciembre, decembreando... y nosotros, viajando

Digamos que la rima es un tanto fácil y manoseada, pero así es este mes lleno de altos y de bajos y de idas y de venidas... Por el momento, quedémonos con el inicio, en el Expocómic (muchos años hacía que no lo pisaba, y bien que me lo he pasado subsistiendo a base de ramen y de la maravillosa energía de las caras conocidas y desconocidas), vendiendo cincuenta ejemplares más de mis “Historias de la Tierra Incontable. Círculo Primero: El Despertar”, cuya cifra de ventas totales anda por el medio millar. Las cosas no van mal en lo que a lectores se refiere, no señor...

Por lo demás, idiomas varios, estudios más varios aún, pocos dineros y muchos quehaceres... es decir, que seguimos en ello, sea lo que ello sea, esperando a la Navidad (que siempre me ha gustado) y pendiente (otra vez: a la vejez, viruelas) de fechas de entrega obligatorias y calendarios de exámenes. Cosas veredes, Sancho...

Y mientras tanto, mal que bien, nos lo vamos montando.