viernes, 8 de agosto de 2014

Lento, despacio agosto

Que la vida es curiosa, ya lo sabíamos, y que este verano era atípico, también... así que aquí seguimos, esperando al Sol, disfrutando del que ya hay, superando el a veces picado oleaje, y ascendiendo a la cumbre metro a metro, como debe de ser. Lo demás, pues es vivir... y a vivir se aprende viviendo.

Maravilloso, como cada año y a pesar de las dificultades, ha sido el Celsius 232, donde como decía ya de la feria del libro de Madrid, empezamos a tener lectores, de los que se han leído los libros y te vienen entusiasmados a hablar de ellos (“tengo en una estantería especial los libros de Tolkien, los de Ursula K. LeGuin, y los tuyos...”), y vienen no ya a comprar el último, sino a la presentación que hicimos el sábado 2 a las 17’40 h., todos entusiasmados. Y si eso fuera poco, le di un libro nada menos que a Patrick Rothfuss, en mano, y a quien le hizo gracia que le citase en el mismo. ¿Qué más se puede pedir?

Seguir viviendo, seguir aprendiendo... y poder seguir disfrutando muchísimos años de esta vida recién descubierta. Lento, despacio, con calma...

No hay comentarios: